sábado, 17 de febrero de 2018

Joven madre muere en un asalto a un supermercado

Una trabajadora de 26 años fue asesinada por la espalda por un delincuente que asalto un super, este sábado en la tardecita. Lamentablemente los trabajadores salimos cada día a lucharla y no sabemos si podremos volver o si un malandra nos arrebatara la vida por unos pesos.

Para el gobierno esta muerte será un número, en la estadística, pero habrá una pequeña niña que llorara y estañara a su madre. Para la cúpula del Ministerio del Interior sera culpa del aumento del consumo, ya sabemos que Bonomi es un cínico e hipócrita, protegido de Mujica, un individuo sin capacidad ni para dirigir un Kiosco; Su ladero tiene un cargo político de regalo, cuyo único merito es ser el hermano del presidente Vazquez.

Para la dirigencia del Pit Cnt, esta muerte al igual que otras tantas de trabajadores y trabajadoras que vienen ocurriendo en el Uruguay, no tendrá importancia, no habrá ni movilizaciones ni reclamos, están muy ocupados por los problemas internos del PCU, la remoción de la compañera Muniz, el juicio a Lula y la arremetida de la derecha.

Quienes desde el año 2010 están al frente del Ministerio del Interior han demostrado hasta el hartazgo ser incompetentes, solo la tozudez del Pepe Mujica, puede darse el lujo de continuar respaldando tanta estupidez, tanto cinismo y sobre todo tanta indiferencia, falta de autocritica y soberbia.

Si Bonomi tuviera un poco de vergüenza tendría que haber renunciado hace rato. 

El presidente Vazquez borro de un plumazo a uno por contratar a la nuera, y estuvo bien, pero no le importa que mes a mes siga aumentando el numero de victimas de la delincuencia y los violentos.

Los uruguayos debemos preguntarnos: ¿porque el gobierno hace bien poco para combatir la delincuencia? ¿hay una intencionalidad de tener a la gente con temor? Reconozcamos que lo único seguro es que algún día seras victima de un robo, y esperemos que el delincuente no ande de mal humor y salvemos la vida si mayores consecuencias.

Tengo la convicción de que nos quieren tener inseguros, temerosos, preocupados por nuestra vida y la de nuestra familia; Más atentos a cuidar nuestra casa y bienes, para así no analizar y percibir el deterioro de una sociedad dividida y fragmentada por etiquetas de izquierda y derecha, progresistas y oligarcas. Donde se alimentan odios, donde los delincuentes se creen tener el derecho de quitarnos hasta la vida y el gobierno termina siendo complice por acción u omisión.

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